“Hay generaciones de gerundenses y de catalanes que nos están contemplando desde la memoria colectiva. Uno de ellos ayer hace exactamente 74 años que fue asesinado. Un gerundense, un intelectual, un político, un periodista, Carles Rahola. Fue asesinado, entre otras cosas, por defender la democracia, por defender la libertad, por defender a Cataluña, por defender a la República y por escribir artículos. Nada más que por eso. Por escribir artículos. Uno de ellos lo recordaba ayer la prensa y yo lo quiero citar para acabar mis palabras y para demostrar cómo estamos de decididos a decidir.
Porque no es una decisión personal nuestra. Sabemos que estas generaciones de gerundenses, de catalanes que nos han precedido luchando y trabajando, sin la esperanza probable de ver ‘la tierra prometida’, nos están ayudando y nos están empujando. Y Carles Rahola, que escribía a propósito del heroísmo y del heroísmo de los Países Bajos que hicieron frente a las invasiones alemanas, escribía en el año 38 un texto que sirvió para su condena. Y acababa así. Y creo que su final es nuestro principio:
Porque no es una decisión personal nuestra. Sabemos que estas generaciones de gerundenses, de catalanes que nos han precedido luchando y trabajando, sin la esperanza probable de ver ‘la tierra prometida’, nos están ayudando y nos están empujando. Y Carles Rahola, que escribía a propósito del heroísmo y del heroísmo de los Países Bajos que hicieron frente a las invasiones alemanas, escribía en el año 38 un texto que sirvió para su condena. Y acababa así. Y creo que su final es nuestro principio:
«Con los mismos procedimientos los alemanes junto con los italianos se dedican hoy a la destrucción metódica, científica y sistemática de Cataluña y las otras tierras hermanas. Y hoy como ayer nuestra esperanza de liberación es firme y fervorosa. Los invasores serán expulsados de Cataluña como lo fueron de la pacífica Bélgica y nuestra tierra volverá a ser, bajo la República, en la paz y el trabajo, señora de su libertad y de sus destinos.»
¡Viva Gerona y viva Cataluña libre!"
Las palabras anteriores forman parte del discurso de bienvenida a los asistentes a la primera asamblea general de la Asamblea Nacional de Cataluña realizado el día 13/03/2013 en Gerona por el periodista Carles Puigdemont (ver video min. 11) como alcalde de la ciudad, diputado de CiU y miembro del consejo directivo de la Asociación de Municipios para la Independencia.
Ese discurso tuvo una cierta repercusión en los medios independentistas catalanes, especialmente las palabras finales con la cita de Carles Rahola, un periodista fusilado en el franquismo bajo la 'acusación' de escribir tres artículos que, según el consejo de guerra, "alentaban a las masas a prolongar inútilmente su resistencia".
En concreto, la cita elegida por Puigdemont corresponde a uno de esos tres artículos publicado el 6 de agosto de 1938 en el diario 'El Autonomista', en el que Rahola hace un paralelismo entre la Bélgica invadida por Alemania en la Primera Guerra Mundial y Cataluña.
No obstante, tal y como se puede comprobar en la imagen anterior, una captura de pantalla realizada ayer del enlace a YouTube del video de dicho discurso que acredita que apenas ha recibido mil visitas, parece lógico pensar que Puigdemont no albergara a priori grandes espectativas sobre la repercusión mediática, más allá de los medios independentistas, del discurso de bienvenida de la primera asamblea de la ANC.
El pasado mes de julio sí que fueron recogidas por medios nacionales mayoritarios las palabras que Puigdemont utilizó en la toma de posesión como alcalde de Gerona:
“Anuncio que quedo a disposición del nuevo Parlamento, del presidente y del Gobierno de la Generalitat de Catalunya que surja de las elecciones del 27 de septiembre de 2015 para ejercer la autodeterminación de nuestro pueblo y proclamar, junto con todas nuestras instituciones, el Estado catalán libre y soberano”
Y como es lógico, desde que el domingo, en su intervención de réplica durante la sesión parlamentaria de investidura como Presidente de la Generalitat de Cataluña, Puigdemont hiciera mención a la cita de Rahola en su respuesta a la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, la repercusión medática y política de aquellas palabras suyas pronunciadas en la asamblea de la ANC se ha disparado en todos los medios mayoritarios españoles, así como en las redes sociales.
Porque la elección de la cita con la frase "Los invasores serán expulsados de Cataluña" en aquel asambleario discurso de 2013 tenía una clara intencionalidad política, tal y como reconoce con toda naturalidad el propio Puigdemont en la introducción a la parte final del mismo, y no era otra que "para demostrar cómo estamos de decididos a decidir".
Por eso llama la atención que ahora Puigdemont, en la intervención de la réplica parlamentaria de su sesión de investidura, ya no quiera utilizar la cita del escritor catalán fusilado en el franquismo para 'demostrar cómo están de decididos a decidir', haciendo buena así la teoría de la política líquida de Zygmunt Bauman que afirma que todo es "temporal, pasajero, válido solo hasta nuevo aviso", y confirmando que la elección de la cita de Rahola como símbolo independentista queda invalidada ('se hace líquida') tras estas palabras del Presidente de la Generalitat de Cataluña:
"Señora Arrimadas, veo que usted ha hecho un ejercicio de arqueología 2.0 y tendrá trabajo, porque yo estoy en Twitter desde hace más de ocho años, antes que se conociera que yo era el candidato yo ya me había ganado, sin comprar ni uno, casi veinte mil 'followers', y con méritos propios y, por lo tanto, como puede entender, me he encargado de mi perfil de Twitter durante muchos años. He dicho muchas cosas. No he tenido que pedir perdón nunca para nada. Si alguna vez me pude haber extralimitado con una expresión no me ha hecho falta interactuar con ningún otro usuario para comentarlo. Pero sí que le recomendaría dos cosas.
La primera, levante la mirada del Twitter. Levantemos la mirada del Twitter todos. Porque la república de las personas entiende de personas, y de hechos, y de conocimiento directo. Aquello que se interpreta, o que se reinterpreta, o que simplemente se liquida con los 140 famosos caracteres, a veces abre la puerta a hacer grandes titulares, a hacer alguna expresión afortunada pero profundas injusticias.
Hace pocos días a Zygmunt Bauman le hacían una entrevista en 'El País'. Se la recomiendo con relación a esto porque creo que podría poner un poco de matiz en esta euforia, un punto descontrolada, de intentar interpretar la realidad con las ojeras exclusivas de las redes sociales.
A todos nos iría bien una mirada más natural, levantemos la vista del Twitter y del Whatsapp y entonces quizás, seguramente, nos entenderemos mejor. Y le impediría a usted y al señor Albiol, que deben de tener el mismo community manager porque los recomienda el mismo del que yo he publicado en el Twitter, les impediría hacer una cosa algo más grave que el ridículo.
Ustedes me reprochan que yo dije una vez que teníamos que «luchar contra el invasor». Y no se preocupan de nada más. No se preocupan de nada más. Mire, yo hice esta afirmación, ustedes la deben de haber recogido de un diario, que no es catalán, que recogió una afirmación desafortunada de una persona que la corrigió a partir de una intervención mía que hacía... no recuerdo si el 70º aniversario o el 69º, exactamente el día en que se había fusilado a Carles Rahola.
Carles Rahola fue un periodista, un intelectual, una buena persona que no cogió una arma, que fue ejecutada por el régimen franquista al poco de llegar a la ciudad de Girona. Y tuvo un testigo de cargo que usó básicamente tres artículos de opinión publicados en el diario 'El Autonomista', uno de los cuales se titulaba «Contra el invasor». ¿Sabe qué decía aquel artículo, y espero que usted esté de acuerdo? Se quejaba de los muertos que se produjeron en los bombardeos de la aviación fascista italiana en la calle de Carme, a poca distancia del que era el refugio antiaéreo en el cual él también glosaba uno de sus famosos artículos que sirvieron para fusilarlo. Y por lo tanto, cuando yo aludía a Carles Rahola en el día del aniversario de su fusilamiento, lo hacía por unos valores que espero que usted comparta de que este tipo de invasiones, es decir, la garra del fascismo sobre nuestras vidas no la queremos jamás.
Supongo, supongo que después de esto ya no hace falta que le diga qué opinión me merece su frase, según la cual la diferencia entre ustedes y nosotros es que nosotros defendemos la democracia, con nosotros referido a usted. Ya no hace falta que le comente."
A todos nos iría bien una mirada más natural, levantemos la vista del Twitter y del Whatsapp y entonces quizás, seguramente, nos entenderemos mejor. Y le impediría a usted y al señor Albiol, que deben de tener el mismo community manager porque los recomienda el mismo del que yo he publicado en el Twitter, les impediría hacer una cosa algo más grave que el ridículo.
Ustedes me reprochan que yo dije una vez que teníamos que «luchar contra el invasor». Y no se preocupan de nada más. No se preocupan de nada más. Mire, yo hice esta afirmación, ustedes la deben de haber recogido de un diario, que no es catalán, que recogió una afirmación desafortunada de una persona que la corrigió a partir de una intervención mía que hacía... no recuerdo si el 70º aniversario o el 69º, exactamente el día en que se había fusilado a Carles Rahola.
Carles Rahola fue un periodista, un intelectual, una buena persona que no cogió una arma, que fue ejecutada por el régimen franquista al poco de llegar a la ciudad de Girona. Y tuvo un testigo de cargo que usó básicamente tres artículos de opinión publicados en el diario 'El Autonomista', uno de los cuales se titulaba «Contra el invasor». ¿Sabe qué decía aquel artículo, y espero que usted esté de acuerdo? Se quejaba de los muertos que se produjeron en los bombardeos de la aviación fascista italiana en la calle de Carme, a poca distancia del que era el refugio antiaéreo en el cual él también glosaba uno de sus famosos artículos que sirvieron para fusilarlo. Y por lo tanto, cuando yo aludía a Carles Rahola en el día del aniversario de su fusilamiento, lo hacía por unos valores que espero que usted comparta de que este tipo de invasiones, es decir, la garra del fascismo sobre nuestras vidas no la queremos jamás.
Supongo, supongo que después de esto ya no hace falta que le diga qué opinión me merece su frase, según la cual la diferencia entre ustedes y nosotros es que nosotros defendemos la democracia, con nosotros referido a usted. Ya no hace falta que le comente."
Ayer mañana se publicó en el BOE el
nombramiento de Puigdemont como Presidente de la Generalidad de
Cataluña con las rúbricas del Jefe del Estado y del Presidente del
Gobierno de España. Una publicación incluida en la imagen inicial de este artículo que se realiza después de que Rajoy evitara pronunciarse (tampoco lo hizo en su comunicado del domingo) acerca de la no aceptación del Rey de España a la solicitud de visita de la presidenta del Parlament de Cataluña para la comunicación de la investidura de Puigdemont.
En relación a dicho comunicado, cabe señalar también que el Presidente del Gobierno de España anunció que «no dejará pasar ni una sola acción contra la soberanía» y que llamó soberanistas a los separatistas.
Pues bien, ayer tarde Puigdemont tomó posesión del cargo de Presidente de la Generalitat de Cataluña después de que el Ministro de Justicia del Gobierno de España señalara esto:
“En ningún caso se puede introducir un elemento que desvirtúe el propio
juramento de cumplimiento de las obligaciones y de la Constitución. Por
ello, el Gobierno estará atento a si la fórmula utilizada es
respetuosa con la Constitución o si genera algún tipo de infracción”.
"El Estado de Derecho no está nunca en funciones, por tanto la
defensa del interés general, de nuestro modelo democrático y de
convivencia va a estar presente siempre en las actuaciones del
Gobierno”.
Sin embargo, tal y como se puede comprobar en el vídeo anterior de la toma de posesión, Puigdemont evitó nombrar al Rey y a la Constitución limitándose a prometer «fidelidad a la voluntad del pueblo de Cataluña». Una decisión que tampoco fue impedimento para los aplausos de Jorge Fernández Díaz, el Ministro de Interior del Gobierno de España.
Sin embargo, tal y como se puede comprobar en el vídeo anterior de la toma de posesión, Puigdemont evitó nombrar al Rey y a la Constitución limitándose a prometer «fidelidad a la voluntad del pueblo de Cataluña». Una decisión que tampoco fue impedimento para los aplausos de Jorge Fernández Díaz, el Ministro de Interior del Gobierno de España.
(Inicio actualización 26/01/2016)
Una decisión que tampoco fue impedimento para las palabras registradas en el vídeo anterior, pronunciadas por el Presidente del Gobierno de España nueve días después de la toma de posesión de Puigdemont.
(Fin actualización 26/01/2016)
Loqueveo tras analizar los hechos señalados en el presente artículo es que esta viñeta de Manel Fontdevilla sigue retratando fielmente la situación existente en España en relación a Cataluña. Solo sería necesario actualizarla cambiando al personaje que pregunta, manteniendo (de momento) al que escucha y añadiendo otros dos personales junto a este último, en el lado de 'los invasores'.
